Desde hace unos meses estoy escribiendo algunas notas para la revista
Be Glam. Aquí la primera de ellas que salió en el número de Abril.
En pleno Brooklyn, Williamsburg se ha convertido en un foco de inspiración para buscadores de nuevas tendencies en moda y en lifestyle. Tiendas de ropa vintage conviven con boutiques de lujo y con locales de diseño donde artistas ascendentes despligan sus innovadores creaciones. La moda nace a minutos de Manhattan.
Hay un lugar en el que habitan las nuevas tendendias, entre la decadencia industrial y la creatividad barata. Hay un lugar en el que la juventud del mundo espia lo Nuevo. Y para llegar a él no hace falta ir demasiado lejos. Basta con salir de Manhattan, cruzar el East River y desembarcar en Williamsburg, un barrio situado en la parte norte de Brooklyn, el distrito más poblado de la ciudad de New York.
El Glam tour comienza en Bedford Avenue, arteria principal de Williamsburg. La avenida, que vale la pena caminar en toda su extensión, recorre unas siete cuadras hasta Grand Street, frontera que día a día se va extendiendo con la incorporación de nuevos locales que aumentan las posibilidades de comprar y de descubrir nuevas tendencias. La manera más rápida y directa de llegar es el subway (Línea L es la que desembarca allí). Una vez en la superficie se respira ese aire bohemio que caracteriza a este barrio y que contrasta con lo moderno de la Gran Manzana. En este particular escenario, las bicicletas, conviven con los autos de lujo y los jóvenes lugareños con los turistas.
Desvío por la calle 6 Si bien la mejor recomendación es perderse en las calles de este nuevo SoHo y dejarse sorprender por los pequeños y peculiares locales, desviarse por la calle 6 y hacer algunas paradas es una buena opción. En Shoe Market (160 N 6th street) zapatos y botas esperan ansiosos a los amantes de estos accesorios con diseños exclusivos. Un poco más allá, tiene lugar la feria Artists and Fleas, dónde se respira un poco del Williamsburg original, con ese tradicional sentido de comunidad. Alli ropa vintage, discos, arte, remeras, chocolates y libros se reúnen en un galpón retro que convoca tanto a los artistas locales y a los nóveles diseñadores que muestran sus creaciones al ritmo de la música que tocan distintos dj’s en vivo.
En la esquina, donde la calle 6 se cruza con la calle Berry, se levante The Future Perfect (North Side, 115 N 6th St ). Más que una mueblería, podría describirse como un showroom de diseño y decoración. Curada al estilo de una galeria de arte moderno, es un espacio ideal que invita a la inspiración visual. Muebles, lámparas, vajilla y objetos de diseño se exhiben cuidadosamente. Enfrente, un Buda dorado corona una pileta de flores en Sea, un restaurante tailandés cuya exotica decoracion invita a espiar.
En el recorrido hay tres locales que no pueden pasarse por alto: Fluke, Noisette y Golden Calf. El primero recopila ropa vintage de los 60 y 80. Pensadas para la mujer, cada pieza tiene su propia personalidad. Golden Calf ofrece una bella combinación de muebles modernos con antiguedades asiaticas. Finalmente, quienes entren en Noisette encontrarán una deliciosa mezcla de ropa urbana y euro- chic de las marcas francesas Maje, Repetto y Sandro.
Volviendo por la calle 5, en dirección a Bedford, se encuentra The Jean Bar (116 N 5th Street). Para los amantes de este clásico, el local ofreceu na gran selección de jeans y otras prendas de lujo de excelentes diseñadores a muy buenos precios. Ya en Bedford, la ropa que sera tendencia está presente en Mini Minimarket (218 Bedford Ave).
Al mediodia, en el 135 de la calle 5, un pintoresco bistro francés llamado Juliette invita a degustar de un brunch en el bar antiguo ubicado en la entrada, en el jardín de invierno o en la incredible terraza. Quienes prefieran platos más rápidos, como sandwiches y ensaladas, el lugar indicado es Fabiane's. Ubicado en el centro de Williamsburg (42 North Fifth Street), invita a sentarse un par de horas a contemplar la postal de este barrio.
En lo que queda del recorrido, Amacord (223 Bedford Ave) y Houndstooth (485 Driggs Ave) tienen lo major en ropa vintage para hombres. Para ella, Fille de Joie (197 Grand St) presenta sus prednas de una manera escenográfica.
Mine (177 Grand St) con sus diseños en hierro y metal y A+G Merch (111 N 6th), que exhibe objetos arte de lo más diversos, son referents en deco. Catbird (219 Bedford Av) despliega joyas y regalos; y Fuego (249 Grand St) objetos y artesanias de diseñadores locales e internacionales de Perú, México, Italia, Vietnam y Barcelona.
La tarde puede terminar en Roebling (143 Roebling). Alguna vez un espacio industrial, hoy un tea room con techos altos, luces bajas, sillones confortables, buena música y un variado menu de té, cafes y vinos.
El barrio de los artistasWilliamsburg es actualmente el hogar de una próspera comunidad artística. Así lo muestran no sólo los multiples locales de diseño sino también las galerias de arte contemporáneo como Sarah Bowen Gallery (210 North Sixth Street) y Like the spice (224 Roebling Street), entre otras.
Movidos por los bajos alquileres, los grandes espacios disponibles y el fácil acceso a Manhattan los primeros artistas se mudaron en los 70s cuando el SoHo y East Village ya estaban repletos. Para 1996, Williamsburg ya contaba con una población de 3 mil artistas. Actualmente, el vecindario es también magnético para la gente joven que se muda a la ciudad de New York.
Hoy, Williamsburg es un boom inmobiliario. Las grandes y abandonadas fábricas están siendo convertidas en lujosos condominios y los edificios históricos se están reciclando. La costa que había caido en el abandono, sera pronto revitalizada.y la nueva construcción de altos edificios está cambiando la cara del vecindario.
Para aquellos que en su visita a New York quieran volver rejuvenecidos, inspirados y con un aire de bohemia, Williamsburg es es una muestra de la convivencia de lo tradicional con lo ultra moderno, conviertiéndolo en un trend hot spot que está marcando tendencia.
